Durante estas últimas dos semanas nos hemos dedicado a preparar a los niños con distintas actividades para celebrar la Navidad. En el oratorio hicimos las manualidades típicas de Islandia llamadas “Jólafundur” y hablamos de cómo podemos hacer su cunita más suave y cómoda con nuestras buenas obras-cada obra buena es como una pajita que llena su pesebre.
También invitamos a los niños que participan del catecismo en los pueblitos a venir a Stykkishólmur para participar del retiro de Adviento. El párroco viajó desde Reykjavík y de este modo pudieron aprovechar para confesarse antes de la Navidad. Nosotras pudimos prepararlos dándoles una charlita sobre el Sacramento de la Confesión. El tema fue “Para ser libres nos libertó Cristo” (Gal. 5,1) y San Pablo sigue: Manteneos, pues, firmes y no os dejéis oprimir nuevamente bajo el yugo de la esclavitud.” Explicamos cómo es el pecado que nos esclaviza, pero que Jesús dio a Pedro y a los apóstoles el poder de perdonar los pecados en su nombre. El Santo Padre Francisco habló de cómo debemos reconocer la realidad de que el pecado nos esclaviza, “Si no reconocemos esto, nunca podremos tener el perdón de Dios, porque si ser pecador es solo una palabra, o modo de hablar, no necesitamos el perdón de Dios. Pero si es una realidad que nos esclaviza, necesitamos esta libertad interior del Señor, esta fuerza que proviene de Él”.
Después de esto, todos los niños participaron de la Santa Misa en honor a Nuestra Señora de Guadalupe (era 12 de Diciembre). El Padre predicó de Nuestra Señora y dio a cada niño una estampita de la Virgen. Al final de la Misa, después de una breve oración de acción de gracias, tuvimos nuestra fiestita de Navidad. Habíamos preparado muchos juegos y en cada uno podían ganar un poquito de dinero de papel. Con este dinero, podían comprar regalitos y dulces. ¡Qué alegría verlos divertirse tanto con algo tan simple! Jugaron entretenidamente por más de hora y media. Después los llevamos a la capilla donde les recordamos el objetivo de la celebración: festejar que Dios, Señor de toda creación, vino a la tierra como hombre para salvarnos del pecado. Terminamos nuestra fiesta cantando villancicos a todo pulmón. A ellos les encanta cantar canciones navideñas.
Esta semana tuvimos el pesebre viviente y el último oratorio del año con más manualidades navideñas “Jólafundur”, y más villancicos para prepararnos para recibir al Niño Dios. Les pedimos oraciones por nuestros niños y jóvenes, para que verdaderamente hagan espacio en sus vidas para Jesus en esta navidad y aprendan a amarlo cada día más.